Envejecemos en sociedad, igual que vivimos acompañados en todas las etapas de nuestra vida y para todas las personas es importante sentirse dentro de esta sociedad, con amigos y familiares con los que podamos compartir nuestras vivencias y sentimientos. Uno de los mayores riesgos que padecen las personas mayores es la soledad, sobre todo en caso de viudedad o de fallecimiento de sus amigos y redes de apoyo.
Las ventajas de relacionarse son:
- Fortalece nuestras raíces en el lugar donde vivimos
- Contribuye al desarrollo personal
- Nos libera de angustias y miedos
- Estimula nuestra integración
- Nos anima a realizar nuevas actividades
- Nos ayuda a sentirnos más activos
Y qué podemos hacer para fortalecer nuestras relaciones sociales, unos consejos podrían ser.
Si vive en pareja:
- Propóngale ir a clases de baile, no sólo ejercitarán el cuerpo, se divertirán y conocerán a otras parejas
- Organice una cena romántica. El romanticismo no tiene edad
- Salga a pasear con él/ella
Si vive solo/sola:
- Conozca a personas en su misma situación, si es viudo o viuda, hay asociaciones que organizan actividades y donde puede relacionarse
- Propóngase hacer algo nuevo, alguna actividad que le atraiga y no se ha atrevido a empezar todavía: fotografía, excursionismo, cerámica,…
- Acérquese al centro social de su barrio o población, le sorprenderá la oferta de cursos, charlas y actividades que se realizan.
Si sus hijos y nietos viven cerca, disfrute de ellos, pasee o realice otras actividades con ellos como invitarles a una taza de café o haga con sus nietos un árbol genealógico para que conozcan a toda su familia. Y si viven lejos, mantenga contacto con ellos, aprovéchese de las nuevas tecnologías y haga un curso de Informática y véalos por Skype.